Apreciado Carlos:
Reciba el más afectuoso abrazo de amistad.
Ha sido un justo reconocimiento el del gobierno francés. La condecoración Orden Caballero de la Legión de Honor es una nueva evidencia de su valioso oficio como mediador de paz que ha sido siempre.
El país requiere de su disposición. La paz en Colombia sólo es posible con canales abiertos para la comunicación, que nos permitan a los colombianos construir caminos para la democracia y la reconciliación.
Su gestión ha significado siempre una esperanza y el homenaje de Francia, al que nos unimos sus amigos, es una justa declaración de sus méritos, puestos siempre al servicio de los intereses de la patria.
Esta distinción llega en un momento crucial, por las definiciones que la Nación debe tomar en su camino hacia la paz. Es hora de que decidamos cuál debe ser nuestro futuro: en medio de los tambores de guerra y el sonar de las trompetas que anuncian probables éxitos en el campo militar, la alternativa de una negociación política es imprescindible.
Comparto con usted su preocupación por el diálogo y su inquebrantable iniciativa de un encuentro para la paz. Lo acompaño solidariamente en la búsqueda de la libertad para los secuestrados que padecen en la selva la crudeza de la guerra. Reconozco también su valor periodístico, al presentarnos en el semanario Voz una mirada crítica de la sociedad moderna: esa es una seria contribución a la democracia. Después de medio siglo de labores, el periódico que usted dirige se ha convertido en una expresión de plausible independencia. Que sea esta la oportunidad para expresarle mis deseos por su éxito y decirle: ¡Ánimo, siempre adelante!
De usted, con los sentimientos de mi más alta consideración,
Horacio Serpa Uribe
Gobernador de Santander
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